¡Gloria a DIOS en las alturas, paz y amor en la tierra a los hombres de buena voluntad!
La sabiduría y el amor penetre entre los que quieren atender algo de las enseñanzas de nuestro PADRE; todos estos tiempos para el CREADOR y la MADRE NATURALEZA son hermosos, son nítidos y son fortaleza, y quisiera que esa fortaleza la reciban vuestros hermanos, hijos de mi PADRE, hijos de la MADRE NATURALEZA, pero no la reciben con amor, no la reciben con fervor, como debería de ser, como cuando el hijo le pide a su madre y su madre le da la fuerza y el valor a sus hijos, así quisiera que recibieran todos, pero es como hablar con la roca cuando la piedra es fuerte y está enterrada entre las demás rocas, así está pasando con los hijos del CREADOR.
Cuanto tiempo se viene diciendo: valor, fortaleza, fuerza, humildad de espíritu, humildad de amor, humildad de fortaleza, para fortalecer el espíritu y darle vida al templo, eso es lo que se debe de hacer, porque día por día se va acercando más y más la limpieza a la MADRE NATURALEZA, pero en vez de dar limpieza se da vanidad, orgullo y muerte, que no es la desencarnación nítida, para entregarle el cuerpo a la MADRE NATURALEZA y la luz a vuestro PADRE, no, es una cosa que día por día está peor, como cuando vino el hermano Moisés y el mundo estaba amargo, oscuro, doloroso y temible, pero hoy está mucho más, porque hoy vuestros hermanos son sordos, ciegos y mudos, nada oyen, nada ven, nada entienden, nada escuchan, por mucho que se enseñe y se hable, todo se va al fango, no digamos a las aguas cristalinas, sino al fango, a la tristeza y a la oscuridad, porque oír por oír, no es iluminante hacia los mundos de luz, sino dolor, oscuridad y tristeza.
Los tiempos venideros serán tiempos más amargos, serán tiempos más duros, no que los de la MADRE NATURALEZA, no que los entregue vuestro PADRE, sino vuestros hermanos, hijos de mi PADRE, hijos de la MADRE NATURALEZA, que son más ciegos, teniendo luz no ven, son más sordos, teniendo sentidos no oyen, son sordos, mudos y ciegos, y no hacen que se extienda la verdadera luz sobre ellos, sino que buscan la verdadera oscuridad, el dolor, la tristeza y la amargura, que entregan a mi MADRE NATURALEZA, que es la MADRE nítida y pura, porque es la esposa de nuestro PADRE CREADOR, donde todo lo recibe con amor, donde todo lo entrega con luz, donde todo lo siente con gran alegría y donde recibe a sus hijos.
Hoy está cruel, duro y amargo el mundo, como lo que significó para el hermano Jesús, cuando le dieron el trago amargo de hiel, porque creían que era a él a quien amargaban, y no sabían que ese trago de amargura, iba a ser regada sobre todos mis hermanos que lo acongojaron, lo humillaron, pero no era el hermano Jesús el que recibía la humillación, sino ellos mismos los que recibían la humillación, la amargura y el dolor, y que hoy aún están dando vueltas, vueltas y vueltas, y quedan como el caracol en la crisálida, así son vuestros hermanos dando vueltas, y los pocos que tratan de escuchar, no extienden las enseñanzas nítidas, como deberían extenderlas, pero con amor, paz y mucha luz en la MADRE NATURALEZA.
Hermanos, lo único que os digo ante vuestro PADRE y ante la MADRE NATURALEZA es, tengan valor, tengan paciencia y pidan en sus lechos, mientas sus cuerpos descansan, que se extienda la tristeza que le dan a la MADRE NATURALEZA al que se la merezca, porque a la MADRE NATURALEZA la han llenado de tristeza, la han llenado de amargura y de oscuridad, teniendo ojos no ven, teniendo sentidos no sienten, teniendo esa luz infinita que se extiende por todos los poros de la MADRE NATURALEZA, hoy es todo lo contrario, y solo le dan dolor, tristeza y amargura.
Muchos seres se reúnen en las grandes cuevas de tristeza, de amargura, de angustia y de mucha oscuridad, a pedirle a una estatua hecha por el hombre, más no hecha por vuestro PADRE, mi PADRE solo hizo a vuestros hermanos de luz, de amor, de mucha fortaleza y entregó mucho amor, entregó mucha sabiduría, pero el hijo del CREADOR, no contempla o no quiere ver la profundidad con que han formado la oscuridad, menos van a ver la luz que se extiende en cada uno, son ciegos, mudos, sordos y venenosos, porque siglos tras siglos han habido grandes catástrofes para ver si así ven, han habido grandes oscuridades, pero no que se oscurezca la MADRE NATURALEZA o se oscurezcan sus estrellas, sino en cada templo que está oscuro, está negro, está venenoso, está enfermizo, porque está sordo, mudo y ciego, teniendo todos los sentidos están envueltos en el dolor, cada uno da su dolor como lo forma, como quiere encontrarse; entonces hermanos, si se internan en mi PADRE y se internan en la MADRE NATURALEZA y quieren conocer y dar luz, en vez de entregarse a la oscuridad, anda a los bosques, pide luz, pide amor y pide mucha fortaleza, como cuando lo hizo Moisés, como cuando lo hizo Jesús, que es el mismo Moisés, que pidió fortaleza y salud, para poder entregar a sus hermanos, palabras de amor, palabras llenas de luz y palabras de sabiduría, para poder llegar a ser un maestro y poder decir: “PADRE, gracias por lo que me enseñas, gracias por lo que me das, gracias por la luz que quiero extender y que tal vez por temor, no lo puedo hacer, dame el valor para llenarme de luz, de mucho amor, de fortaleza, de sabiduría para extenderla a mi hermano mundo que es sordo, ciego y mudo; esas son las palabras que a vuestro PADRE y la MADRE NATURALEZA tienen que pedirle, para tener más valor, porque así como tienen la MADRE NATURALEZA pisoteada, enfermiza, ensangrentada por tanta desencarnación sin tener su hora, porque cada templo tiene su día, su hora y su momento de entregarse a la MADRE TIERRA y entregar una luz sabia que es el espíritu hacia el CREADOR, pero no, acá todo es ceguera, todo es tristeza, todo es amargura, todo es mentira y engaño, porque la mentira ante el mundo es grande, poderosa y oscura, la mentira es lo más triste, por la mentira matan, por la mentira roban, por la mentira hacen escándalo, por la mentira dicen y enseñan todo lo contrario que enseñó vuestro PADRE a través de sus grandes mensajeros al hermano mundo, ni que decir de la MADRE NATURALEZA, que es completamente ignorada y desconocida por sus propios hijos, porque sus mismos hijos inconscientes y egoístas, la borraron de todos los escritos sagrados, para ellos vender al mundo solo sus enseñanzas temerarias, mezquinas y malintencionadas.
Primeramente hay que pedir valor a vuestro PADRE, valor a la MADRE NATURALEZA, y que el PADRE nos entregue un buen guía espiritual, lo que llamáis en la tierra un ángel, eso es lo que tenemos que pedir, un guía sano, esclarecido y nítido como las aguas cuando limpian las raíces de los árboles, así hay que ser, nítidos, puros y a la vez sabios para entender qué es la MADRE NATURALEZA y que todos somos hijos ante vuestro PADRE, como el árbol que tiene hojas, raíz, flor y fruto, un fruto sano y nítido, cuando el árbol es verdaderamente bien cultivado y bien extendidas sus ramas hacia la MADRE NATURALEZA. Así debería de ser vuestro hermano mundo, de extender buena semilla, para así estar en la luz del CREADOR; pero hermanos, todo esto se ha perdido, todo esto estaba escrito en las grandes hojas, porque si en verdad, Adán recibió los árboles para extender la palabra de vuestro PADRE, y en las cortezas se extendía el amor y la sabiduría del hombre del ayer, hoy convertido en un escorpión, porque ya ha perdido su luz, su camino y ha perdido también la sabiduría, pero que no quiere otra vez saber qué es la sabiduría de mi PADRE y qué es la MADRE NATURALEZA para nosotros.
La MADRE NATURALEZA ante el CREADOR es lo más nítido, porque es su esposa, aún cuando el mundo se horrorice, hable y diga que es una blasfemia tal afirmación, es la esposa legitima de mi PADRE, donde todo lo impregña para sus hijos, todo, el amor, la paz, la sabiduría y la luz que extiende sobre mi MADRE NATURALEZA; sus hijos, hermanos de mi espíritu, han perdido toda esa sabiduría, no saben donde pisan, no saben que pisotean y para donde van.
Hermanos, enseñen el amor, enseñan la paz, enseñen qué somos nosotros ante vuestro PADRE, somos luz , pero que está oscura, se puede decir que están perdidos en el abismo, no saben ni que son las aguas, menos van a saber qué es la luz, se dice y suena en muchos labios, luz, pero no saben qué es la luz, es donde tenemos que alumbrar millones de mundos, porque cada estrella, cada sol, son mundos de vuestro PADRE donde extiende toda su sabiduría, todo su amor, toda su paz, y los abraza y dice: “ven a mi e ilumina los mundos de oscuridad, para que todos vuelvan a mi lado”
Ese es vuestro PADRE, esa es mi MADRE NATURALEZA, pero de todo esto se han olvidado, todo esto no lo escuchan, hoy dicen en la tierra o entre la misma hermandad, no volteemos a ver ni hagamos caso de ese ignorante, que ese no sabe ni donde está parado, menos va a saber lo que sabemos nosotros; muchas veces ese ignorante está lleno y resplandecido de luz, sabiduría y mucha paz.
Hermanos, perdonen si alguno lo estoy ofendiendo, porque verdaderamente estoy diciendo como vuelven la mirada hacia la MADRE NATURALEZA y como extienden la luz hacia vuestro PADRE; solo os digo, encomiéndate mucho ante vuestro PADRE, no te arrodilles, inclina la mirada hacia la MADRE NATURALEZA y pide cuando sea su tiempo que ella se bañe, que ella se estremezca, que ella se sacuda, seas libre de todo peligro, libre como el aire, libre como la luz y libre como las aguas y no seas exterminado; hermanos de mi espíritu, de nuevo les digo, perdonen si los he ofendido, pero no quiero ofenderlos, sino indicarles que sean nítidos, puros, sencillos, cristalinos como es el agua, cristalinos como es la luz e iluminen como los soles y dan la claridad a los árboles, a los poros de la MADRE NATURALEZA y dan la salud a los animalillos de los bosques.
Todos hemos venido a dejar huella imborrable en el seno de la MADRE NATURALEZA, no ha pasar sin pena ni gloria.
¡Que la Luz Infinita del PADRE ETERNO los acompañe y el camino sea perfecto!
Con mucho Cariño: Atentamente: Jeremy